"Conoced la Verdad y ella os hará libres"
Para
todos ha sido muy fuerte saber que todos los seres humanos no eran hijos de
Dios.
Fuerte, porque hemos dejado de lado los libros bases de todas las
religiones ya que en todos se trata el tema y nos hemos dejado llevar por el
consumismo espiritual.
Que
muy lejos quedó aquéllo que habíamos aprendido en metafísica - que derivó de la
New Age creada en Estados Unidos como brazo de su nuevo orden mundial de los
iluminatti - de que todos éramos hijos de Dios (incluso bush quería que ésto se
enseñe en las escuelas) .
Era
lindo pensar así, pero fue la mejor forma de que la oscuridad hiciera lo que
quisiera y los hijos de la luz, pensando que todos éramos hermanos, no
hiciéramos nada.
Muchos hijos de la oscuridad cambiaron y aceptaron ser hijos de la luz
cuando sus espíritus fueron cambiados; otros no.
Y fue
el tan nombrado Juicio final en 1998 y ya no tienen posibilidad de
cambiar.
Los
hijos de la Luz, somos todos hermanos; los de la oscuridad, no son nuestros
hermanos aunque compartamos la misma familia terrestre; no somos hijos del mismo
Padre.
Hoy
estamos todos mezclados, el no reconocerlos, como el negarlos trae mucho
sufrimiento a los hijos de la Luz.
Lucas 9 55:
"Entonces volviéndose Él, los
reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois..."
Está clarito, no? espíritus blancos o
negros.
Y si El Jefe lo dijo simplemente no pueden
cabernos dudas.
Y dijo: "Dos estarán en la misma cama, el uno será
tomado, el otro será dejado... o dos estarán en el campo el
uno será tomado, el otro no... lo que quiso decir es que
estamos todos mezclados, por lo que en las familias hay espíritus de luz y de
oscuridad.
Ya no son tantos Gracias a Dios !!! En éstos
dos mil años, muchos cambiaron; pero los que quedan, están.
En extinsión, pero están.
Mide a las personas con el manómetro; fíjate sus
frutos... por los frutos se ve el árbol; los siete pecados capitales te
dan una pauta muy clara al respecto, ya que eran los siete arcángeles de la
oscuridad. Ellos ya no existen, pero sus hijos los evidencian.
Tenemos que tener coraje y muy buena voluntad para
cambiar lo que aprendimos mal y para evaluar de manera imparcial, aunque
nuestros sentimientos se sientan afectados.
Pidamos a diario la presencia del Jefe, todos
juntos y con mucha Fe, porque los hijos de la Luz están sufriendo mucho y a
veces cometiendo errores que les traen muy dolorosas
consecuencias.
Recuerda que el día y la hora, solo Dios lo sabe, y que el que persevera
triunfará.
Seguimos haciendo el Gran Llamado al Padre, todos los días hasta que
juntos festejemos Su Llegada.
Que
la Luz del Cristo ilumine tu mente !!!