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Asunto: | [gap-argentina] LAS ENSEÑANZAS DE NUEVA ORLEANS | Fecha: | Domingo, 30 de Agosto, 2009 22:17:41 (+0200) | Autor: | galeon <galeones @.......com>
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LAS ENSEÑANZAS DE NEW
ORLEANS El 30 de Agosto de
2005 un huracán denominado Katrina
asoló la ciudad de New
Orleans,
devástándola completamente. Son muchos los que intuyeron ahí una intervención
sobrenatural. Horas antes de entrar en la Florida, Katrina era una tormenta tropical. Los expertos
nos decían que no había peligro para Miami mas que fuertes lluvias. Pero
justo antes de entrar en la Florida, Katrina se convirtió en huracán y cambió de
dirección hacia el sur, cruzando Miami de norte a sur. Hubo varios
muertos, gran parte de la ciudad se quedó sin electricidad y la devastación de
árboles fue inmensa. Nadie lo esperaba. Otra vez en el mar, el huracán
Katrina tomó más fuerza y se dirigió hacia Nueva Orleans, destruyéndola.
Hay datos en torno del huracán
Katrina que nos hacen pensar en una
purificación: El arzobispo Hugh, de New Orleans dijo después del desastre: "Lo
mas importante es no dudar la presencia de Dios y su gracia salvadora y
transformadora. Estoy convencido que Dios nos
purificará por este medio".
Katrina significa "pura" en griego. Llegó a la costa del golfo el
29 de Agosto (trayectoria), fiesta del martirio de Juan Bautista, profeta que
predicó la necesidad de conversión ante la venida del
Mesías. El "French Quarter"
(Barrio Francés) de New Orleans, de antaño pintoresco y musical, se
convirtió en centro de ocultismo y
depravación moral. Los sourvenirs
representativos de la ciudad pasaron a ser artículos relacionados con esas
cosas. El 31 de Agosto iba a comenzar
la fiesta anual de Nueva Orleans, denominada por los propios organizadores
"Southern Decadence"
(Decadencia del Sur) que duraría todo el fin de semana. Era dirigido por el "orgullo
homosexual", su propósito era jactarse en exhibiciones masivas por las calles de toda
clase de depravaciones
sexuales. Sus organizadores hacían alarde del apoyo del
alcalde, y de la gran multitud de participantes que esperaban. (Se dice que
decían: "¡haremos sonrojar hasta a Sodoma y Gomorra!")
Un día antes
del comienzo de la fiesta, se rompieron los diques de la
ciudad. En New Orleans,
como en las otras ciudades afectadas del golfo, hay muchísimos buenos
cristianos, por cierto muchos latinos. Hay grupos de oración y apostolados que
sirven al Señor. Muchos allí oran intensamente para que se manifieste la
misericordia de Dios y haya conversión en su ciudad. Ellos también fueron
víctimas del huracán. El huracán no solo arrasó con casinos sino también con
las iglesias. El domingo después del desastre la primera lectura, Ezequiel 33,7-9, nos enseña la importancia
de estar alertas: «Así dice el
Señor: «A ti, hijo de Adán, te he puesto de atalaya en la casa de Israel;
cuando escuches palabra de mi boca, les darás la alarma de mi parte. Si yo digo al malvado: "¡Malvado,
eres reo de muerte!", y tú no hablas,
poniendo en guardia al malvado para que cambie de conducta, el malvado morirá
por su culpa, pero a ti te pediré cuenta de su
sangre; pero si tú pones en guardia al malvado para que cambie de
conducta, si no cambia de conducta, él morirá por su culpa, pero tú has
salvado la vida.»
TODOS necesitamos arrepentirnos y ser
purificados: La
humanidad se encuentra en grave decadencia moral. Necesita Atalayas que le
digan la verdad sobre el pecado, sus consecuencias y el remedio en Cristo.
Hemos sacado a Dios de las escuelas, de las cortes y de la vida pública. Con
frecuencia también lo hemos sacado de los hogares. Aun gran cantidad de
católicos, en todos los países, aceptan anticoncepción, aborto, fornicación,
adulterio, homosexualidad,
materialismo... Se ha perdido la
conciencia de la gravedad de estos males. Vivir cómodamente se ha convertido
en la prioridad. Dios nos ha dado capacidad para desarrollar la
tecnología pero hemos hecho de ella un
dios. Hemos caído en lo que el Cardenal
Ratzinger llamó la "facilonería" de la vida que nos embota la mente con
egoísmo y apegos. Dios no quiere castigarnos. Pero llega el momento
cuando es necesaria purificación
para evitar que nos perdamos del todo. La
purificación nos mueve a reconocer que somos pecadores y necesitamos
conversión. No es el final de la historia sino la preparación para
la victoria. Los hombres no pueden crecer en la vida con Dios hasta que son
libres de la impureza que los domina.
Dios desea salvar y no
condenar: Cuando Dios envía
profetas que adviertan sobre castigos es con la esperanza que el pecador se
convierta y se salve ateniéndose a su misericordia.. Recordemos que
Dios es Padre de todos y desea la salvación de todos. El desea que sus hijos
se amen y se ayuden. El se ofende cuando sus hijos acusan y juzgan a sus
hermanos. Vemos el ejemplo de Moises que intercede continuamente por los Israelitas
para que no reciban el castigo que merecen. Abraham intercede ante Dios a favor
de Sodoma: «Abordóle Abraham y dijo: "¿Así que vas a
borrar al justo con el malvado?"» -Génesis
18,23 Dios corrige a Jonás cuando éste
no acepta la misericordia de Dios para Nínive. Y Yahveh
dijo: - «Tú
tienes lástima de un ricino por el que nada te fatigaste, que no hiciste tú
crecer, que en el término de una noche fue y en el término de una noche
feneció. ¿Y no voy a tener lástima yo de Nínive, la gran ciudad, en la
que hay más de ciento veinte mil personas que no distinguen su derecha de su
izquierda, y una gran cantidad de animales?» -Jonás
4,10-11 ¿Por que ocurren
los males? Debemos tener
cuidado, especialmente ante el sufrimiento ajeno. Sabemos que Dios creó todo
bueno, pero el pecado del hombre ha dañado la creación.
Pues sabemos que
la creación entera gime hasta el presente, y sufre dolores de parto. -Romanos
8,22. En la Salve rezamos: "A tí suspiramos gimiendo y llorando en este valle de
lágrimas". Las
calamidades no son ocasión para condenar, sino para
salvar Si bien es
cierto que los desastres naturales son fruto del pecado del hombre, no
significa que las víctimas sean mas culpables que otros.
- «Llegaron
algunos que le contaron lo de los galileos, cuya sangre había mezclado Pilato
con la de sus sacrificios. Les respondió Jesús: «¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que todos los demás
galileos, porque han padecido estas cosas? No, os
lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo modo. O
aquellos dieciocho sobre los que se desplomó la torre de Siloé matándolos,
¿pensáis que eran más culpables que los demás hombres que habitaban en
Jerusalén? No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo
modo.» Lucas
13,1-5 Al mismo tiempo Jesús
nos enseña a no condenar a las
víctimas, y también nos advierte que todos necesitamos
conversión: "Si no os
convertís, todos pereceréis del mismo modo".
Podemos concluir que mientras no
debemos hacer juicios sobre otros, haremos bien en aprovechar los avisos que
Dios nos da para nuestra conversión y la de nuestros hermanos.
Todos
debemos tomarnos en serio la purificación: Todas las ciudades donde se ha predicado la Palabra de Dios requieren
conversión:
- «¡Ay de ti, Corazin! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si
en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que se han hecho en
vosotras, tiempo ha que, sentados con sayal y ceniza, se habrían convertido.
Por eso, en el Juicio habrá menos rigor para Tiro y Sidón que para vosotras. Y
tú, Cafarnaúm, ¿hasta el cielo te vas a encumbrar? ¡Hasta el Hades te hundirás» -Lucas 10,13-15 (HADES=INFIERNO) - «¡Jerusalén, Jerusalén, la que mata a los profetas y apedrea a los
que le son enviados! ¡Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como una
gallina reúne a sus pollos bajo las alas, y no habéis querido!
Pues bien, se os va a dejar desierta vuestra
casa. -Mateo
23,37-38 No todos los ciudadanos de Jerusalén
mataban y apedreaban profetas:
Jesús amaba a Jerusalén y por eso se
lamentaba por ella. Allí Jesús instituyó la Santa Misa y el sacerdocio, allí
Jesús muere por todos nosotros y allí resucita victorioso. También allí estaba
la Iglesia recién nacida que aportó los primeros mártires. Pero a pesar de
todo esto la ciudad no regresó al Señor. La purificación habría de venir en
forma de legiones romanas y no quedó piedra sobre
piedra. La Cruz Dios
no nos abandonó en nuestra miseria sino que, haciéndose hombre por amor,
sufrió en su carne la cruz. Dios no quita la cruz porque es producto de la
libertad de los hombres. Dios respeta nuestra libertad. Pero al abrazarla por
amor, la transformó en camino salvación para todos. Sus seguidores deben hacer
lo mismo. Ser cristianos no nos libra de la cruz
sino que nos da fuerza y amor para abrazarla. La gracia se
manifiesta por medio de la cruz. La doctrina católica no acepta la
novedosa idea de que Dios nos llevará en el rapto
antes de la tribulación. No. Mas bien, Cristo, siendo el Hijo de Dios,
sufrió y murió en la cruz. El nos
dijo: «Si
alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y
sígame.» -Mateo 16,24. La
Cruz siempre ha estado y estará en el centro de nuestra fe como
camino necesario para llegar al cielo. Todos sufrimos las consecuencias del
pecado en la sociedad. Los sufrimientos nos sirven para unirnos a la Cruz de
Cristo y crecer en la fe. Rechazarla es rechazar la salvación. Bendita es la
cruz que nos purifica y nos libera. No acomodarnos al
mundo "Habrá grandes terremotos, peste y hambre en diversos
lugares, habrá cosas espantosas, y grandes señales del cielo".
-Lucas 21,11. Los desastres
naturales no significan que el fin del mundo sea inminente. Cuando será el fin
no lo sabemos. Pero si nos recuerdan que el mundo pasará y que nuestra casa
definitiva no es la tierra. Somos mortales y, aunque no nos toque vivir el fin
del mundo, nuestra vida aquí es corta. Jesús advierte a sus discípulos
que estamos en una gran batalla espiritual y no debemos
acomodarnos a este mundo que pasa.
Dios manifiesta su misericordia aun en las
tragedias Cuando el Huracán
Katrina llegaba a New Orleáns, hecho un monstruo categoría 5, con vientos de
175 MPH, de repente vino un viento extraño que le desvió y le hizo perder
fuerzas. Los meteorólogos se quedaron sorprendidos pues no atinaban a entender
como se produjo. Sin la intervención de ese viento misterioso, toda la ciudad
pudiese haber quedado en seguida bajo más de 4 metros de agua. Pocos hubiesen
sobrevivido.
Chuck
Kelley, Pastor bautista de New Orleans, ahora sin hogar, discierne la mano de Dios en esta situación:
"Imagínese que hubiese ocurrido (a New Orleans) si
hubiese recibido un golpe directo". "El dique no se rompió hasta después de la tormenta, cuando
los vientos se habían calmado, y los trabajadores de rescate pudieron salir.
Si el dique hubiese cedido durante el huracán miles de personas hubiesen
muerto...."
En las pruebas Dios da la gracia para que comprendamos que
nuestra vida está en sus manos y encontremos su verdadero propósito en El. En
New Orleans, mientras algunos se aprovecharon para hacer mal, hemos visto
también grandes manifestaciones de amor procedentes de diversos sectores.
Padre Jorge Rivero.
ORACION POR
LA MISERICORDIA DIVINA En el año 1935, Santa
Faustina Kowalska (a la que Jesús reveló la Devoción a
la Misericordia Divina), recibió una visión de un angel, enviado de
Dios, para castigar a cierta ciudad. Ella comenzó a rezar por misericordia. De
repente vió a la Santísima Trinidad y experimentó la gracias de Jesús con
ella. Al mismo tiempo comenzó a pedirle a Dios por misericordia con palabras
que escuchaba interiormente: "Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de
tu amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros
pecados y de los del mundo entero. Por su dolorosa Pasión, ten misericordia de
nosotros y del mundo entero."
Diario,
475. "Mientras
continuaba rezando así, el ángel no pudo implementar el castigo". Diario 474. "El próximo día mientras entraba en la
capilla, otra vez escuchó una voz interior, instruyéndola a rezar la oración
que después llamó la "coronilla" . Esta vez se añadieron las palabras
"y del mundo entero". Diario 476. Desde entonces rezaba esta oración casi constantemente,
ofreciéndola en especial por los moribundos. Sta. Faustina
Kowalska comprendió que merecemos castigo, pero también que
Jesús quiere derramar su misericordia si confiamos en El.
Una vez mas podemos ver que toda la tecnología del mundo no
nos salva. Estamos en las manos de Dios. Sin embargo los hombres desprecian el
amor de Dios y las advertencias de María Santísima que nos ha avisado en
Fátima y otras apariciones, sobre las consecuencias del pecado. ¿Aprendemos?
¿Ponemos nuestra vida en sus manos?
DIOS MANIFIESTA
SU MISERICORDIA
Al llegar a New Orleáns, Katrina, con vientos de 175 km p.h. era un monstruo, pero de repente vino un
viento extraño, que le desvió y le
hizo perder fuerza. (Los
meteorólogos no atinaban a entender.)
Sin la intervención de
ese viento misterioso toda la ciudad hubiera podido quedar inundada en pocos
minutos, con 4 metros de agua. Ymuy pocos hubiesen
sobrevivido. Chuck Kelley, Pastor bautista de New Orleans, vió la mano de
Dios en ese hecho.
"Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo, Sangre, Alma y
Divinidad de tu amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, como
propiciación de nuestros pecados y de los del mundo entero. Por su
dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo
entero". Diario, Divina
Misericordia 475.
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