... Varios cientos de
años atrás, en muy
pocos discípulos se podía depositar tal confianza. Hoy (1944), en
todos los países hay muchos
de ellos, aunque muy pocos en Alemania, debido a que en ese
desdichado país se
ha concentrado el poder de la Logia Negra, y también al mal uso de
la fuerza
shambállica. Dicha fuerza ha sido aislada, utilizándose su aspecto
destructivo
en Alemania, sin equipararla con la actividad de la energía de
amor de la
Jerarquía. Este hecho ha imposibilitado (desde 1933) la entrada de
los
discípulos que pertenecen a la Logia Blanca. Sin embargo, en todas
partes la
concentración de discípulos activos es mayor que en ningún otro
momento de la
historia humana.
He acentuado
esto porque la segunda frase,
"que el grupo amplíe las rasgaduras en esos velos", se refiere a
los
discípulos y grupos reunidos a su alrededor en todas partes.
Esos grupos, en
gran número y de distintas potencias de rayo, guiarán al mundo
hacia la nueva
era. La presión que ejercen sobre el plano físico
ha precipitado la crisis entre la gran Logia Blanca y la Logia
Negra. Su
trabajo consiste en permitir entrar la luz, y donde va la luz la
Logia Negra
debe disolverse y desaparecer. Se nutre del espejismo y la
ilusión y emplea los
velos de maya como protección. Los estudiantes no deberían
nombrar ni
diferenciar los cuatro velos, los cuales en sí son transitorios
y variables.
Difieren cuando reciben el impacto de los siete rayos. No es
posible ni
práctico distinguir uno del otro, excepto desde el ángulo de la
Jerarquía, y en
la actualidad su destrucción (anteriormente no fue así) debe
producirse desde
el plano físico denso, el ataque lo deben realizar las
personalidades e
individuos en cuerpos físicos. En cierto modo es un nuevo
acercamiento, pues
hasta ahora muy pocos discípulos e iniciados han sido capaces de
trabajar de
esta manera. Hoy trabajan muchos millares de discípulos,
aprendiendo así
a aplicar las antiguas reglas para el trabajo que debe
realizarse dentro de los
velos de maya.
Emplear y hacer retroceder el
mal hasta el plano astral. Trabajar con el Sonido y conocerlo
como
fuente de poder. Emplear primero la Voz, luego el O.M. y después
el Sonido. Los
tres serán suficientes.
Existen otras
reglas, pero estas les
proporcionarán los datos necesarios para realizar este
tipo de trabajo,
reglas que el audaz discípulo necesita conocer. Han sido ya
aplicadas y la
mente inferior no debe interpretarlas sin la ayuda de la
conciencia iniciática.