LOS DEVAS Y LOS TALISMANES
SAGRADOS
Como vimos oportunamente, la fuerza espiritual del Cosmos es
transmitida al planeta Tierra por medio de tres Talismanes
sagrados:
1)
El DIAMANTE
FLAMIGERO, o CETRO de Poder del SEÑOR DEL MUNDO, que transmite FOHAT, o
Fuego Cósmico del aspecto SHIVA de la
Creación.
2)
El CETRO del BODHISATTVA, o Cetro Jerárquico, que transmite
Fuego Solar procedente del propio Universo, en virtud de una muy bien
definida identidad de RAYO, cualificado por el aspecto VISHNU.
3)
El TALISMAN VIVIENTE, oculto en las entrañas de la Tierra,
esotéricamente descrito como KUNDALINI, que transmite el Fuego de la
Materia y está cualificado por el poder ígneo de BRAHMA, el tercer aspecto de la
Divinidad, el de la Actividad
Inteligente.
Pero, además de estos Cetros principales, existe una
pluralidad de Talismanes menores cuyo cometido es transmitir y diseminar
por todo el planeta las energías solares y planetarias que surgen de los
tres Cetros mayores. Estos Talismanes están vinculados con la evolución
angélica de la Tierra y, de acuerdo con su evolución y funciones
específicas, dependen de uno u otro de los tres grandes Centros
planetarios: SHAMBALLA, la JERARQUIA espiritual y la
HUMANIDAD.
Trabajan coordinadamente con los Departamento del MANU,
Señor de las Razas, del BODHISATTVA, Señor de las Religiones espirituales
y del MAHACHOHAN, Señor de las Civilizaciones mundiales. Veamos esta
relación:
CENTRO PLANETARIO
DEPARTAMENTO
ASPECTO
JERARQUIA ANGELICA
SHAMBALLA
...................... MANU
............................ SHIVA
................ AGNISVATTAS
JERARQUIA
...................... BODHISATTVA
................ VISHNU .............
AGNISURYAS
HUMANIDAD
....................... MAHACHOHAN ............. BRAHMA
.............. AGNISCHAITAS.
Habría que aclarar, sin embargo, que los Ángeles o Devas,
sin distinción alguna, y en virtud de su propia constitución espiritual,
son verdaderos Talismanes o Agentes mágicos que reflejan y transmiten las
energías procedentes de los Cetros de poder actuantes en el planeta y
centralizadas en las vidas de SHIVA, VISHNU y
BRAHMA.
Los Ángeles son, en realidad, una extensión en múltiples
niveles vibratorios de las energías de los Cetros que hemos venido
estudiando. En cierta manera, puede considerárseles como una
personificación de las mismas. Esta afirmación aparecerá un poco confusa
quizás en la mente de los lectores pero si se tiene presente que los
Ángeles son la fuerza viva y eterna que crea el ESPACIO -considerando a
este como una ENTIDAD- y que en sus múltiples y desconocidas Jerarquías y
funciones constituyen los éteres que cualifican y energetizan todos los
planos de la Naturaleza -aportando además la sustancia o esencia elemental
con la que son creadas todas las formas existentes en cada uno de los
planos del sistema solar- se comprenderá entonces por qué, esotéricamente,
los Ángeles son considerados como verdaderos Talismanes vivientes y
centros magnéticos a través de los cuales se difunde la energía cósmica de
los Cetros.
Aclarado este punto, habríamos de añadir que existen otros
Talismanes creados de sustancia cósmica similar a la de los tres Centros
principales, aunque de poder magnético menor y de carácter circunstancial,
operando en la Tierra y formando focos de atracción
magnética.
Uno de tales Talismanes, quizás el más antiguo del que se
tiene noción, es el llamado esotéricamente "Talismán Solar", el que fue
misteriosamente introducido en las profundidades geológicas del planeta,
en aquel punto geográfico denominado ocultamente ISLA BLANCA, en el MAR DE
GOBI y que constituyó el aglutinante magnético que concentró las fuerzas
etéricas, telúricas y espirituales que crearon el Centro místico de
SHAMBALLA, Morada del Señor del Mundo y de todas las Entidades venusianas
o Señores de la Llama que instauraron la Gran Fraternidad Blanca de la
Tierra.
Pero, hay además muchos Talismanes sagrados ocultos en las
entrañas de la tierra o en el misterio insondable de los éteres, que
centralizan o aglutinan ciertas corrientes etéricas, telúricas e ígneas
que, "dévicamente manipuladas" determinan la creación de los lugares
magnéticos del planeta aquellos que por decisión espiritual del SEÑOR DEL
MUNDO son (o habrán de convertirse en) sedes de acontecimientos
históricos, espirituales o
místicos...
El tema de la creación de las naciones, ciudades, razas,
religiones, civilizaciones y culturas planetarias que examinaremos más
adelante, será mejor comprendido si se tiene en cuenta que antes de que
las Entidades planetarias y dévicas intervengan en estos procesos de
creación e inicien sus particulares actividades, han sido previamente
depositados en los parajes convenientemente señalados de la Tierra, los
correspondientes Talismanes sagrados que centralizarán las energías del
"Cielo y de la Tierra" y constituirán la divina levadura con la cual se
amasará el pan de una nueva creación
planetaria.
Volviendo a la simbología, que a igual que la analogía,
forma parte inseparable del descubrimiento y comprensión de las grandes
verdades cósmicas, podríamos analizar ahora algunos de aquellos grandes
símbolos solares que desde edades lejanísimas ostentaron los monarcas de
la Tierra como representaciones vivas del poder de SHAMBALLA.
Veamos:
1.
La CORONA que ciñen
en sus sienes los reyes de la
Tierra.
2.
El CETRO que
empuñan en su mano derecha en las grandes ceremonias reales, como símbolo
de poder.
3.
La ESFERA,
simbolizando el Mundo, que sostienen en su mano izquierda como emblema de
la extensión de aquel poder.
Tales atributos reales son, en realidad, representaciones
simbólicas de los potentes atributos jerárquicos revelados en la vida
cósmica del SEÑOR DEL MUNDO. Esta es la
analogía.
- La ESTRELLA de NUEVE PUNTAS, símbolo oculto de Sus Nueve
Perfecciones, que brilla fúlgidamente sobre Su augusta
Cabeza.
- El CETRO DE PODER, o DIAMANTE FLAMIGERO, que empuña en Su
mano derecha cuando hay que transmitir Fuego cósmico o solar a la
Tierra.
- El MUNDO, del cual es REY y REGENTE supremo y al que
mantiene dentro del omniabarcante "círculo-no-se-pasa" de Su
Conciencia.
Todo cuanto hace referencia al SEÑOR DEL MUNDO y al Centro
místico de SHAMBALLA, ha de ser estudiado lógicamente sobre la base de
símbolos y adaptándose estrictamente al principio de analogía. El estudio
de los CETROS no ha de ser una excepción, como acabamos de observar ya que
las tradiciones populares más antiguas y los viejos relatos ocultos sobre
los Devas en la vida de la Naturaleza, reflejan muy fidedignamente a
veces, el sentido místico y sagrado de los Cetros de poder. En ciertos
grabados provenientes de las edades más lejanas en los que se intenta
representar a los Devas, se pone frecuentemente en manos de éstos un
pequeño Cetro o Varita mágica, en cuyo extremo principal puede observarse
una brillante estrella que comunica luz en su entorno y mediante el cual
efectúa maravillosas transmutaciones en la vida de la Naturaleza,
determinando siempre mágicos y beneficiosos acontecimientos. Lo mismo
puede observarse en las narraciones infantiles cuando a las hadas madrinas
y a los espíritus de las flores se les menciona siempre llevando consigo
su pequeña varita mágica. Y si nos atenemos a símbolos más asequibles
todavía, hay que fijarse sólo en el bastón de mando de las jerarquías
militares y civiles, gobernadores y alcaldes..., poderes rectores en la
vida social y política de los pueblos, sin olvidar la batuta mediante la
cual son dirigidas las orquestas y grandes grupos
musicales.
Se trata, en realidad, de símbolos eternos como la vida del
propio Dios, que se aproximan a la vida del hombre para que éste vaya
comprendiendo progresivamente la eternidad de su origen. Y como dato
aleccionador de cómo el símbolo pudo convertirse en tradición mística,
sólo le basta al observador clarividente observar la actividad
desarrollada en los mundos sutiles por aquellas minúsculas y maravillosas
entidades dévicas llamadas ocultamente "elementales constructores", que,
en una infinita prodigalidad de jerarquías, constituyen el aire, el fuego,
el agua y la tierra, para darse cuenta de la universalidad de la
simbología de los Cetros o Talismanes. La clarividencia nos demuestra la
realidad mística que subyace en las tradiciones de los pueblos, aún en las
de los menos evolucionados. A través de la misma puede percibirse que todo
Deva con "cierta representatividad" sostiene en sus manos -o en aquello
que parece una prolongación de las mismas- una especie de cetro luminoso o
varita mágica por medio del cual se hace obedecer por el grupo de
elementales a sus órdenes. Este pequeño cetro crea un campo magnético
dentro del cual mantiene agrupados a sus minúsculos ayudantes y realiza la
obra que tiene asignada, manteniendo en constante y permanente actividad a
su grupo Dévico. Tal observación resulta extraordinariamente ilustrativa
pues permite aseverar prácticamente la verdad de que hay un constante y
permanente fluir de las energías cósmicas procedentes de los grandes
Cetros de Poder planetarios, las cuales son transmutadas adecuadamente y
transmitidas -en orden a la jerarquía espiritual- a todos los puntos del
planeta a través de agrupaciones dévicas de todo
tipo:
AGNISVATTAS, AGNISURYAS y AGNISCHAITAS, que actúan como
verdaderos Talismanes, hasta llegar a las más alejadas regiones
planetarias en la escala de valores Dévicos, ocupadas por los pequeños
servidores del Plan, o elementales constructores, en cuyos diminutos
cetros se refleja, sin embargo, la Gloria infinita de la Energía que surge
esplendente de los grandes CETROS
divinos.